Termina un año muy difícil para lxs trabajadorxs en Argentina. Sin decisiones favorables para nuestros intereses, el Gobierno de Macri ha definido su política en favor de quienes detentan el poder real en nuestro país, cuestión manifestada inicialmente con la brutal transferencia de recursos hacia mineras y sojeras, continuada con despidos, salarios a la baja y presupuestos pobres para las áreas sociales y expresada en cada una de las grandes decisiones tomadas.
Si no fue más a fondo el ajuste propuesto por el Gobierno nacional fue por la pelea que diversos sectores estuvimos dispuestos a dar. Pese a la defección de la CGT, que no pasó de algunas quejas iniciales rápidamente morigeradas a fuerza de concesiones convenientes sólo para sus intereses de grupo, fuimos miles quienes evitamos que las decisiones que afectarían las necesidades primordiales de la población fueran aún más fuertes. La pelea contra los tarifazos, la no aceptación de un techo salarial del 25 % para los estatales y el sinnúmero de movilizaciones populares para enfrentar las políticas oficiales constituyen buenos ejemplos al respecto.
Tenemos como deuda la conformación de una fuerza mucho más importante para enfrentar estas políticas. La unidad de acción en donde imperen los intereses de la clase trabajadora por sobre los sectoriales es un desafío para 2017. Será un año electoral, con un oficialismo necesitado de reafirmar sus definiciones y donde seguramente habrá espacio para luchar por nuestras conquistas.
Un buen año para CICOP
El último Congreso de Delegadxs de nuestro gremio había esbozado una especie de balance de lo que fue el año 2016 para CICOP, valorándose muy positivamente. La firme decisión de defender nuestros derechos y la Salud Pública se evidenció en las numerosas instancias de debate desarrolladas, las veinticinco semanas en las que llevamos a cabo medidas de fuerza, las muy importantes movilizaciones que protagonizamos – muchas de ellas junto a nuestros aliados de la CTA Autónoma – y las históricas carpas en Plaza Congreso y el Obelisco, acciones que forman parte de una acumulación que será fundamental de cara al futuro. La plena incorporación de los residentes a la vida activa del sindicato, las elecciones que ratificaron en gran forma el rumbo elegido en la conducción, así como el reingreso a la misma de valiosxs compañerxs cabalmente representativxs de sus seccionales son también elementos muy destacados de esta etapa.
Una actitud irresponsable del Gobierno
La insólita actitud del Gobierno provincial, rayana en la irresponsabilidad, nos obliga a redoblar esfuerzos en la primera semana del año. La falta de convocatoria a nueva reunión paritaria, luego de la irrisoria oferta del jueves 22/12, rechazada in límine en la propia mesa de negociaciones por nuestrxs delegadxs, reafirma la ausencia de compromiso fehaciente de parte de la Gobernadora Vidal con la Salud Pública en la provincia de Buenos Aires.
La notable distancia entre los discursos y la práctica se torna muy evidente con esta realidad. De poco sirve decir que la Salud es una de las prioridades de gestión cuando la situación de lxs trabajadorxs es la que padecemos y el destrato se convierte en marca registrada de parte de los funcionarios. Enviar a la Legislatura para su aprobación un presupuesto para el área de Salud aún menor a los padecidos en los últimos años es una definición política que va en consonancia con las decisiones paritarias que vienen adoptando.
La propuesta de aumento salarial de un 1,6 % promedio para el cierre de 2016 se hace más notoria en su insuficiencia cuando observamos que la oferta implica para nuestra categoría inicial (ingresante de planta de 36 horas semanales) un incremento de 98 pesos para sus bolsillos. Y se hace más enojosa cuando los funcionarios esbozan que podría ser mucho mejor si nos dispusiéramos a discutir un acuerdo paritario por todo el año 2017. La medida, calificada como extorsiva por CICOP, no tiene otro fundamento más que intentar sancionar a los profesionales de la Salud por la firme decisión de negociar en forma separada el trimestre final de año y lo que será la discusión del próximo.
El cierre de la paritaria de lxs trabajadorxs judiciales a inicios de la semana arroja un dato significativo. El acuerdo del 36 % promedio retroactivo al mes de agosto implica que sólo se definió el año que recién culmina. Ha quedado abierta la discusión para 2017, sumando a nuestro planteo y con la expectativa de que junto a los docentes y un sector muy importante de los estatales (ATE) podamos articular acciones que nos pongan en mejor situación para disputar por mejores salarios y condiciones laborales.
Con la exigencia de una nueva convocatoria con una mejor propuesta salarial que también defina un compromiso de cumplimiento de los pases a la planta de becarixs – acordado en la paritaria anterior -, la correcta y definitiva aplicación del decreto de Desgaste laboral y el tratamiento de las condiciones laborales de lxs residentes, promovemos la realización de asambleas durante la semana a fines de mandatar a lxs delegadxs para el Congreso del viernes 6/1 para resolver las acciones a seguir.
SECCIONALES PROVINCIALES
HOSPITAL A. KORN DE M. ROMERO: CORTE EN LA AVENIDA 520
HOSPITAL A. KORN DE M. ROMERO: CORTE EN LA AVENIDA 520
El día 28/12/16, en el Hospital Alejandro Korn de Melchor Romero realizamos un corte de la calle 520, en la puerta del Hospital. Hemos terminado el año 2016 como lo empezamos, en la calle, en una actividad realizada con los compañeros de ATE y en el marco de la Jornada de Lucha de CICOP. Trabajadores de la institución, compañerxs de otros hospitales como el Ingenieros, San Martín, Cestino, El Dique, Especializados de La Plata y San Roque, miembros de la comunidad, pacientes, el MDR, dirigentes de ATE y CICOP del hospital y de los de la región y miembros del Consejo Directivo de CICOP nos acompañaron en la jornada.
En el marco de la crisis que atraviesa hoy el sistema de Salud de la Provincia de Buenos Aires, el Hospital A. Korn de Melchor Romero se encuentra en una situación particular debido a la implementación de medidas por parte de las autoridades que no han sido consensuadas con los trabajadores y son carentes de toda planificación. Las mismas fueron planteadas en el marco de dar respuesta a los organismos de derechos humanos que plantean, al igual que nosotrxs, que no puede haber personas internadas en el piso. Entonces, con el argumento de implementar la ley de Salud Mental y la transformación del hospital, intentan desplazar pacientes y trasladar servicios a sectores no adecuados, sin el personal necesario, sin la previsibilidad acorde y a costa de achicar otros servicios. La improvisación y la ausencia de planificación generan muchas dificultades a la hora de brindar asistencia a la población ya que, para implementar estas medidas, se pensó en achicar 16 camas de Clínica Médica, lo que genera, inevitablemente, consecuencias también en los hospitales de la Región. Las autoridades argumentan estar implementando la ley de Salud Mental porque estarían así integrando los pacientes con padecimiento mental al hospital general. Mientras tanto, el Servicio trasladado (SAC – Servicio de Atención en Crisis), actualmente repartido en dos servicios en forma provisoria desde la intervención del Juez Arias, está construyendo un nuevo espacio desde hace casi 3 años, pero, como la obra está paralizada por falta de dinero, se han tomado estas medidas que, finalmente, terminan vulnerando aún más los derechos tanto de pacientes como de trabajadores.
Otra de las medidas planteadas fue el pedido de un cronograma compulsivo de guardias de 12 horas para todo el personal de la Ley 10471 del hospital general. La Dirección Asociada argumenta que se toma la misma en pos de mejorar las condiciones laborales del personal. Nosotrxs insistimos en que deben ser optativas para lxs compañerxs que ya están trabajando con otro régimen.
Esta situación se agrava aún más con el planteo de las autoridades respecto de la reprivatización inminente de servicios – en principio cocina y limpieza -, argumentando que, con tan poco personal y siendo el mismo parte del plantel hospitalario, se está brindando una mala prestación. Estos servicios – y otros – se privatizaron en los ’90; algunos volvieron al estado hace unos años y nuevamente hoy se quieren privatizar. La intención de las autoridades sanitarias y hospitalarias es mostrar que el sector público no funciona y que, por lo tanto, se hace necesaria la privatización de los distintos servicios. Esto es, para nosotrxs, ni más ni menos que el inicio de la implementación de la Cobertura (supuestamente) Universal de Salud (CUS), que significa también poca salud para pocos.
Además, no se están cumpliendo los acuerdos paritarios. Los expedientes de lxs becarixs que tenían que pasar a interinos en la tanda de diciembre, aún no han salido del hospital.
Así que, nuestro planteo en la calle es: ¡Nosotros decimos que lo Público SÍ funciona!
- designando más personal y los equipos interdisciplinarios necesarios
- con mejores salarios para los trabajadores
- con provisión adecuada de insumos
- con más presupuesto y la decisión política de invertir en un sistema de salud público para toda la población
- con planificación consensuada con los trabajadores
- con inversión en infraestructura (obras paralizadas de la maternidad hace 7 años y del nuevo SAC hace casi 3 años)
SECCIONALES MUNICIPALES
FLORENCIO VARELA: COMUNICADO DE LA SECCIONAL
BALANCE 2016: SALDO NEGATIVO PARA LA SALUD DE VARELA
Con el cierre de año, se impone la necesidad de reflexionar y sacar algunas conclusiones. Para empezar, es una obviedad decir que 2016 ha sido un año muy difícil para todxs. El área de Salud no fue la excepción y tenemos que salir a denunciar que impactaron muy mal los recortes en programas nacionales y provinciales. Dejaron a los Centros de Salud y CICs sin medicación para pacientes diabéticos, hipertensos o con problemas respiratorios, que contempla la mayoría de las consultas; con escasez de insumos básicos, como agujas o jeringas para vacunar a los bebés y hasta de preservativos y anticonceptivos para una población joven que necesita cuidados y prevención, entre otros déficits importantes. Ante esta situación, el municipio sólo atinó a sacar fondos de otro programa nacional (SUMAR) sin proveer una partida presupuestaria que supliera las graves falencias.
La falta de agentes que hagan tareas de mantenimiento y limpieza pone en jaque permanentemente el funcionamiento de los efectores de salud. Los problemas podrían solucionarse con un equipo técnico medianamente capacitado, dotado de herramientas y de un pequeño presupuesto. Así, pacientes y trabajadores pasamos días y días sin agua, sin baños en condiciones, sin luz y en medio de la mugre. También hay graves dificultades en la comunicación: la mayoría de los Centros no tiene internet y algunos, tampoco teléfono. La accesibilidad, con las calles rotas y los charcos permanentes, hace que la gente llegue como puede, sorteando barriales o basurales y notamos que es un problema que se ha hecho crónico en el distrito.
Un capítulo aparte merece la dificultad para que se garanticen los derechos de las y los trabajadores. Los salarios están atrasados, los agentes municipales cobramos una miseria en concepto de antigüedad y no tenemos derecho todavía a gozar de la jubilación por Desgaste Laboral. Comparando con la situación de las y los profesionales provinciales, hemos quedado muy rezagados y esto puede influir en forma negativa para la permanencia del personal.
La gestión en el área de Salud ha sumado funcionarios que vienen de otros ámbitos, pero sigue sin política sanitaria. Por este errático camino, la toma de decisiones se realiza sin consenso con los trabajadores; las actitudes autoritarias y los aprietes han dejado un sabor amargo en lo que va del año. Un modesto ejemplo reciente es no contemplar la posibilidad de un asueto para las fiestas o no permitir que se pueda conmemorar el duelo ante una compañera o compañero fallecido.
Para finalizar, reconocemos que estas líneas son críticas, pero también están cargadas de esperanza. Tienen por objetivo dar a conocer la situación del área de Salud, a la vez que también manifiesta la voluntad de sostener el diálogo que nos caracteriza. Estamos dispuestos a seguir colaborando y aportando nuestras ideas y opiniones siempre que nos convoquen. Con la convicción de que no habrá política pública posible sin la participación de todxs y no habrá Salud Pública de calidad con sus trabajadores sin derechos. ¡Brindemos por un 2017 más inclusivo y saludable!
CICOP – Seccional Florencio Varela