Continúa la lucha por la reincorporación de lxs despedidxs en el hospital Posadas y en el municipio de Tres de Febrero. En la semana protagonizamos importantes acciones en ambos lugares reclamando la reincorporación de lxs compañerxs y el cese de políticas que avanzan sobre conquistas de lxs trabajadorxs y los derechos de la población. La decisión de movilizar a los ministerios de Salud y Modernización del ámbito nacional manifiesta la disposición a seguir peleando por la resolución favorable del conflicto y por una Salud Pública de carácter universal, que sea gratuita y de calidad.
El Gobierno ha decidido una andanada despiadada sobre lxs trabajadorxs estatales que incluye a la Salud. Sin miramientos, haciendo foco en quienes no están dispuestos a someterse a las políticas de achicamiento estatal y ajuste estructural, los 122 despidos en el Posadas son una clara demostración de definiciones que rayan en lo temerario. Intentar reemplazar profesionales de vasto conocimiento y extensa trayectoria en sectores críticos del sistema de atención por personal inexperto y con serias dificultades para dar las respuestas necesarias en circunstancias adversas, no puede observarse de otro modo.
Esta política, que desde diciembre contabiliza cerca de 5000 despidos, incluye no sólo el objetivo de reducción de personal, sino también excluir de los establecimientos al activo más comprometido con la actividad sindical. Mientras la economía sigue sin arrancar, la inflación persiste, el dólar aumenta –con su consecuente repercusión en los precios de los artículos de primera necesidad – y las inversiones no llegan, las únicas decisiones que se toman tienen el consabido discurso de reducir el déficit fiscal y promover un Estado más ágil y que no esté sobredimensionado. Nada más alejado de la realidad: la reducción presupuestaria en políticas sociales indica definiciones que intentan volcar recursos hacia los sectores concentrados de la economía, agrandando la brecha entre los que más y menos tienen mientras se conforma un cuadro de situación que nos lleva a una nueva crisis que siempre repercute fuertemente sobre la mayoría de la población.
No puede dejar de mencionarse que las condiciones objetivas de precarización en el empleo se han constituido como elementos indispensables para que se puedan llevar a cabo los despidos. Por eso suceden con mucha mayor asiduidad en los ámbitos nacional y municipal, así como en aquellas dependencias provinciales donde subsisten las formas inestables de contratación. Las notables deficiencias del Gobierno anterior al respecto no pueden dejar de ser señaladas. Por ello, el reclamo de CICOP incluye, una vez efectivizada la reinstalación de lxs despedidxs, un inmediato paso siguiente que debe ser la incorporación a planta de todxs lxs trabajadorxs en condiciones precarias de vinculación laboral.
Nuestro sindicato se encuentra al frente de las luchas que se libran en ambos territorios. Sin renunciamientos, seguiremos bregando sin claudicaciones por la restitución de lxs compañerxs en sus puestos de trabajo. En tal sentido, el CDP del viernes 26 decidió instar a la realización de asambleas en la seccionales para discutir acerca de la situación en el Posadas y Tres de Febrero, a la vez que damos continuidad a las valoraciones de lo que sucede en hospitales y centros de salud provinciales y municipales, en aras de ir conformando masa crítica de cara a la indudable pelea que se avecina con salarios y condiciones laborales como ejes centrales. Asimismo, promovemos la más amplia participación en la movilización a Salud y Modernización del próximo martes 30, en el entendimiento de que será necesaria una acción masiva y la mayor unidad posible para modificar el curso del conflicto.
Paritaria con salarios como eje central
En la semana, el Ministro Scarsi reapareció en escena para atender a la prensa, mientras trata de evitar encontrarse con CICOP. En una extensa nota realizada por un medio provincial, se explaya sobre el SAME y la refacción de las guardias como único tema. Resalta, aunque no nos llame la atención, la falta de menciones a la crisis de recursos humanos en el sistema, a la grave situación en el área materno-infantil y a las tremendas dificultades de funcionamiento en hospitales y centros de salud. Con una definición de poner todos los recursos en la emergencia, además de minimizar la persistencia de problemas estructurales graves en ese área, deja de lado la importancia sustancial del resto de las actividades, con una mirada que asoma preocupante por el recorte que ello implica y su falta de integralidad
En este contexto, nuestro objetivo está puesto en la cuestión salarial como problemática fundamental. Ese es el motivo principal por el que no se consiguen profesionales, ya que los salarios en provincia y municipios está muy por debajo de lo que se paga en el subsector privado, en el de obras sociales (ambos con sus variaciones) y hasta en los efectores públicos de la ciudad de Buenos Aires. Ello genera falta de postulantes, sobrecarga en la tarea – con la consiguiente afectación de la salud en lxs trabajadorxs y resentimiento en la calidad de las prestaciones -, puestos vacantes en las residencias y condiciones notablemente inadecuadas para el cuidado de la Salud. Todo ello constituye un cuadro de situación que requiere respuestas muy distintas a las que hemos tenido hasta ahora, así como presupuestos acordes a esos requerimientos.
Lxs funcionarixs del Gobierno provincial, encabezados por su máxima responsable, la Gobernadora María Eugenia Vidal, debieran tener otra actitud política. La llegada de recursos económicos derivados del acuerdo del fondo del conurbano tendría que volcarse en las áreas sociales y, en particular, en Salud. Es allí donde hay más necesidades y donde resulta indispensable tener una política diferente a la desarrollada hasta ahora. Sin mejores salarios no conseguiremos profesionales y ello redundará en un colapso del sistema de atención, del que no estamos tan lejos. Las decisiones de intentar cerrar algún servicio para contribuir a que otro apenas funcione seguirán siendo un achicamiento que será rechazado de plano por CICOP y conformará un conflicto de difícil resolución.
Comenzaremos el mes de febrero con asambleas, reuniones y discusiones en las seccionales para ir definiendo las acciones a seguir. La falta de respuestas en cargos, designaciones y diversas tramitaciones hace caótico el funcionamiento de los servicios. Estamos dispuestos a definir un plan de acción a partir de las decisiones que vayamos tomando en forma colectiva. Como venimos insistiendo desde hace largo tiempo, la Salud no puede esperar.