EDITORIAL
Un Consejo Directivo numeroso y preocupado por la evolución de la pandemia
El numeroso Consejo Directivo Provincial en forma virtual llevado a cabo el viernes 5 de junio dio cuenta de la situación sanitaria en curso en la provincia de Buenos Aires, expresando una elevada preocupación ante el avance de la pandemia y sus repercusiones en el sistema de Salud y en la población. La reunión sesionó haciendo homenaje a María Esther Ledesma, compañera enfermera del Hospital Gandulfo de Lomas de Zamora, quien falleciera durante la semana como consecuencia de haberse infectado con Covid-19 y que, padeciendo comorbilidades que la habían llevado a presentar la licencia correspondiente, fuera rechazada en tres oportunidades por el Sistema de Administración de Personal (SIAPE).
Aún con matices, lxs compañerxs manifestaron las diversas dificultades que atraviesan para desarrollar las tareas en sus lugares de trabajo, con las debilidades propias de un sistema que padece años de atraso y desinversión, lo que no alcanzó a ser subsanado en el tiempo inicial de la emergencia. La participación incluyó a varixs dirigentes de seccionales municipales, que comentaron las vicisitudes que encuentran en la relación con los diferentes gobiernos, poco dispuestos a abrir canales de diálogo y promover consensos que contribuyan a resolver las cuestiones que van surgiendo, propias de la etapa que vivimos.
La problemática se hace más acuciante en aquellos efectores que empiezan a tener un aumento de la demanda por la aparición de casos positivos en proximidad de sus locaciones, que en esta semana tiene su epicentro en la zona sur del conurbano bonaerense. Sin dejar de tener en cuenta que la circulación comunitaria del virus es una realidad fehaciente en toda el área metropolitana, lo cierto es que los brotes que se van dando en determinadas zonas provocan la necesidad de abordajes específicos que han tenido mayor magnitud en algunos barrios con población más vulnerable.
En una nueva conferencia de prensa, los máximos responsables políticos de Nación, Provincia de Buenos Aires y CABA anunciaron la extensión del Aislamiento Social Preventivo para el AMBA hasta el 28 de junio. Sin embargo, esa decisión encuentra numerosas contradicciones en varias definiciones posteriores, donde se acuerda la apertura de actividades no esenciales y se favorece la ampliación de la circulación de personas en la vía pública. Como venimos sosteniendo desde CICOP, la fenomenal presión ejercida por los grupos de la economía concentrada va rindiendo sus frutos, logrando que sus prioridades se consoliden en detrimento del conjunto.
En ese marco, se hace cada día más imprescindible la discusión acerca de dónde conseguir los recursos para que el Estado sea capaz de tomar decisiones sin condicionamientos y con ejercicio pleno del poder. Sin embargo, se continúa negociando el pago de la deuda a los acreedores externos sin investigar su origen y el esbozo de promover impuestos que graven la riqueza y las rentas no ha tenido avances significativos en las últimas semanas, lo que provoca dificultades concretas en la disposición de contar con los fondos necesarios para abordar integralmente la evolución de la pandemia, con todas sus complejidades.
En esta etapa, se viene dando una situación inversa a la que se requiere. Ante el aumento de los casos positivos y la evidente difusión del coronavirus, en lugar de restringir los contactos y la posibilidad de contagios, en los hechos se permite la presencia de más personas en la mayoría de los ámbitos. En la ciudad de Buenos Aires, la apertura de miles de comercios en las próximas semanas generará aún más movimiento de gente mientras se informa la multiplicación de infectadxs y la existencia de casos confirmados en la totalidad de los barrios porteños.
Con cerca de mil infectadxs cada día y habiendo sobrepasado los 22.000 desde su inicio, la epidemia sigue extendiéndose en nuestro país. También se viene incrementando el registro diario de fallecimientos, máxima expresión de la problemática. Como se ha dado en el resto del mundo, las ciudades más densamente pobladas son las que más padecen, produciéndose la concentración de infecciones en CABA y conurbano, que actualmente poseen un 90 por ciento de todos los casos. Por ello, resulta lógica la decisión de avanzar en fases en provincias y ciudades sin circulación viral, así como de extremar los cuidados en la región metropolitana, haciendo más estricto el aislamiento, pero con medidas de apoyo comunitario para preservar los puestos de trabajo, los salarios completos y universalizando la ayuda social.
Las debilidades del sistema de Salud
En la provincia de Buenos Aires, con un aumento considerable de los contagios y el incremento de la demanda sobre los servicios de Salud, la situación es preocupante. Como lo decíamos en Circulares anteriores, la mayor cantidad de camas – generales y en UTI -, así como la cantidad de los respiradores disponibles, no han tenido un crecimiento equivalente en los recursos humanos necesarios. Por ello, se hará difícil enfrentar la propagación de la enfermedad con las mejores herramientas, teniendo en cuenta que el más valioso de los recursos sigue siendo el personal con el que contamos.
El Consejo Directivo Provincial repasó todas las situaciones conflictivas en el área, deteniéndonos particularmente en el tema licencias, no otorgadas a quienes cuentan con más de 60 años, a quienes padecen comorbilidades y a lxs que están a cargo de niñxs y adolescentes. La negativa a conceder las licencias será motivo de acción judicial de parte de nuestro sindicato, siendo la causa indispensable para que se produjera la muerte de María Esther Ledesma. Desde el 16 de marzo y en cada reunión en la que nos encontramos, el Ministro Gollán y el Viceministro Kreplak negaron enfáticamente toda posibilidad de resolución en el sentido planteado.
El único avance en licencias que nos debieran corresponder por derecho ha sido para las embarazadas, conquista del debate paritario que finalmente tuvo su normativa durante la semana que pasó. La histórica falta de personal, agudizada en tiempos de pandemia, nunca debió haberse intentado subsanar a expensas de la salud de lxs trabajadorxs. Los magros salarios y las malas condiciones laborales conforman la causa principal de la imposibilidad de conseguir trabajadorxs para el sistema. CICOP ha venido denunciando el vaciamiento de la Salud Pública a lo largo de años, cuestión que se ha profundizado en la última etapa a partir de decisiones que la colocaron en los últimos peldaños.
La paritaria acordada en abril de 2020 pauta su reapertura para el mes de junio, recientemente iniciado. Será una nueva oportunidad para recomponer nuestros salarios y disponer de cargos genuinos para las incorporaciones que se puedan producir, asignándole a la Salud una importancia que hasta ahora no ha tenido. Habrá que confirmar la disponibilidad para los ingresos de lxs residentes que egresan este año, temática pendiente de resolución de la etapa anterior, a la vez que será indispensable la definición de centenares de trámites que aún esperan su terminación.
El Comité de Crisis central ha sido discontinuado en las últimas dos semanas. Sin justificaciones precisas y de manera unilateral, nos hemos quedado sin la posibilidad de acceder a información y consensuar decisiones en el momento más álgido de la pandemia hasta ahora. Esperamos que la nueva convocatoria para el martes 9 nos permita avanzar en todas aquellas cuestiones que siguen pendientes, como la promoción de los comités municipales, la publicación de las resoluciones en la página ministerial y la definición del suministro de medicaciones faltantes en los efectores, entre otras temáticas.
Otra de las grandes preocupaciones sigue siendo el alto número de contagios en el personal de Salud. Con origen en el pluriempleo, el déficit de equipos de protección personal (EPP) en los distintos establecimientos y, a veces, en su deficiente implementación, las infecciones ya han afectado a cerca de 2.000 trabajadorxs, siendo la provincia de Buenos Aires la más damnificada. Como es sabido, la aparición de casos involucra a muchxs integrantes de los equipos de Salud, debiendo aislarse y dejando de estar disponibles para la tarea por un tiempo. La ampliación de los tests para constatar las situaciones permitiría una mayor certeza en la toma de las decisiones.
Hacia la Jornada Nacional de Lucha
El miércoles 10 de junio llevaremos a cabo una Jornada Nacional de Lucha, en conjunto con distintas organizaciones de la ciudad de Buenos Aires y de varias provincias. La misma es fruto de un amplio consenso que trasciende límites territoriales, sintetizando los reclamos de numerosos agrupamientos que luchan por una Salud al servicio de las necesidades de la población y por derechos para sus trabajadorxs. Será la expresión pública de numerosos encuentros en los que hemos coincidido en visiones y requerimientos en el contexto hostil que propone la pandemia.
Salarios paupérrimos, condiciones de trabajo indignas, ausencia de convocatorias al diálogo, personal e insumos insuficientes, son una realidad cotidiana en la inmensa mayoría de los estamentos. Una problemática que atraviesa el territorio nacional y que es motivo más que suficiente para salir a manifestar. La exigencia de paritarias, equipos de protección, comités de crisis con la participación de lxs trabajadorxs, licencias para los grupos de riesgo, ampliación de los testeos para el personal y protocolos consensuados serán, entre otras, las demandas que confluirán en las acciones.
Hemos acordado el desarrollo de varias actividades que tendrán comienzo a la mañana con acciones locales en cada establecimiento sanitario, continuarán al mediodía con la participación de todas las organizaciones en una Radio Abierta con Rueda de Prensa en el Obelisco y cerrarán por la tarde con una transmisión conjunta a través de las redes sociales. Será el colofón de una jornada muy importante, que tendrá dimensión nacional y que permitirá poner en escena las graves dificultades que atravesamos lxs trabajadorxs de la Salud para dar respuesta a las necesidades de este tiempo.
Desde CICOP hemos contribuido fuertemente a la realización de la Jornada. Con intenso debate en nuestro seno, estrechando lazos con las organizaciones del área metropolitana y afianzando vínculos con los sindicatos hermanos de las distintas provincias, no tenemos dudas de que las condiciones para peticionar por nuestros derechos y los de la población se verán fortalecidas con ella. Y reafirmamos nuestra decisión de seguir construyendo la herramienta que necesitamos para alcanzar una Salud Pública universal, gratuita y de calidad para el conjunto de la ciudadanía.