El jueves 7 miles de trabajadores salimos a la calle para defender nuestros derechos y al sistema público de salud. En el documento difundido ese día decíamos que:
“En nuestro país los planes económicos y sanitarios de ajuste han llevado a que no podamos alcanzar, también en la Argentina, las metas del milenio en 2015, en particular las de reducción de la mortalidad infantil y materna. El ajuste en curso ha llevado al 32 % las cifras de pobreza, empeorando la ya difícil situación heredada de la gestión anterior. Los hospitales públicos y centros de salud siguen siendo la cenicienta del gasto sanitario a pesar de que llevan el peso de la atención de más de 20 millones de argentinos.
Contamos con una ley y una agencia nacional para promover la producción pública de medicamentos, amén de una importante capacidad instalada, que no funcionan. El mercado sigue dominado por las multinacionales argentinas y extranjeras y el precio de los medicamentos los ha convertido en un lujo inalcanzable para millones de compatriotas.
La profundización del modelo extractivista a partir de la década del 90 empeoró las condiciones socio ambientales. En los últimos diez años, el uso de agrotóxicos aumentó de 35 a 350 millones de litros anuales. FESPROSA reafirma su compromiso con el Colectivo Andrés Carrasco y exige la prohibición del glifosato y de la megaminería contaminante.
En el día mundial de la salud, reafirmamos nuestro objetivo de construir un sistema público que garantice la atención universal, gratuita, integral y de calidad para los 40 millones de argentinos en el marco de un ambiente saludable”.
FESPROSA reclama salarios dignos, el fin de la precariedad laboral y rechaza los despidos indiscriminados en todos los niveles del estado, en particular el sector salud. Hace foco en el reclamo de reincorporación de los 640 trabajadores despedidos en el Hospital Posadas, entre ellos profesionales médicos y maestras del jardín maternal. También exige condiciones laborales dignas, el fin de la violencia contra los trabajadores y una política de estado de seguridad para los mismos. FESPROSA rechaza la política de parches y exige la derogación del impuesto al salario. Afirma como necesidad imperiosa la aprobación de la ley nacional que garantice el 82 % móvil para los trabajadores de salud”.
El éxito de la Jornada a lo largo y ancho de nuestro país es un aliciente para seguir construyendo juntos el gran sindicato nacional de todos los trabajadores de la salud.
Reunión de FeSProSa con las Responsables del Programa Nacional de Salud Sexual y Reproductiva
El día 6 de abril se llevó a cabo la reunión de FeSProSa con las funcionarias responsables del Programa Nacional de Salud Sexual y Reproductiva, la Dra. Silvia Oizerovich y la Lic. Gabriela Perrotta. Jorge Yabkowski encabezó la delegación de la Federación acompañado de Liliana Ongaro (Sind. de Prof. y Técnicos del Htal. Garrahan); Noemí Alemany (SiProSaPuNe) y Juan Pedro Bonifazzi (SiPrUS). En primer término, la Federación planteó su preocupación por la continuidad del programa. Las funcionarias respondieron que el Ministerio de Salud había tomado la decisión de dar continuidad al programa como política pública.
En relación a los Anticonceptivos (ACO, Preservativos, DIU, Inyectables, Parches e Implantes), exigimos la continuidad de la provisión y distribución de los mismos dada la información de que habría faltantes, en particular durante los meses de mayo y junio. En este punto, reivindicamos la necesidad de apoyar el programa a través de la producción pública de dichos insumos como sucede, por ejemplo, en la provincia de Santa Fe a cargo de Laboratorios Públicos (LIF-LEM).
A posteriori, planteamos la necesidad imperiosa de que la Guía de Atención integral de ILE sea refrendada por resolución ministerial para poder contar con un marco normativo nacional.
Más adelante, sostuvimos la necesidad de impulsar como política del Ministerio la producción pública de los insumos provistos por programa, en especial la producción pública de Misoprostol 200mg en comprimidos aptos para usos tocoginecológicos, generando también la autorización de la ANMAT para tal fin.
En relación a la atención de la amenaza de parto pre término, se planteó la necesidad de la producción pública de Nifedipina 10mg, ya que su producción por parte de la industria está discontinuada.
Por último, se planteó la necesidad de la asistencia y provisión de tratamiento hormonal y de insumos quirúrgicos para el abordaje de la salud en personas trans.
Las funcionarias mostraron acuerdos generales, diciendo estar predispuestas a continuar el diálogo y a su vez ir dando respuestas a lo planteado.
Consideraciones finales:
Si bien es auspicioso que se reafirme la continuidad del programa, los peligros que acechan al mismo, expresados en el decreto de enero que lo desactivaba y del cual el gobierno retrocedió, siguen vigentes. Nuestra información es que parte del personal despedido a comienzos de año fue reincorporado, pero no en su totalidad. A su vez, la perspectiva de faltantes está siendo confirmada por diversas fuentes.
Es clave allí que las regionales por un lado alerten a los usuarios y por otro reclamen (junto a la comunidad) a sus autoridades (y también a Nación) que dichos faltantes sean cubiertos con los mecanismos de compra rápida que prevé la ley. El programa significó y significa una ampliación de los derechos de los pacientes, en particular de las mujeres. Defenderlo y ampliarlo debe ser una bandera del conjunto de la FESPROSA.