25 de noviembre de 2022
En el marco del 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres y Disidencias, una vez más sumamos nuestras voces para exigir una vida plena, sin discriminación, en contra de la desigualdad y de todas las distintas formas de violencias, tanto en el ámbito privado como en el público, en los espacios laborales y en cada espacio que habitemos.
La violencia machista y adultocéntrica se reproduce en un contexto capitalista y patriarcal, colocando a las mujeres, disidencias, niñeces y adolescencias en una posición de desventaja respecto a los varones, los cuales son avalados históricamente por su posición de poder. Las intersecciones de otras categorías sociales como la clase, edad, identidad sexual u orientación sexual determinarán aún mayor vulnerabilidad.
Es fundamental la visibilización de las violencias en todos los ámbitos como un problema social y estructural de una sociedad CIS-HETERO-PATRIARCAL.
Basta de Violencia machista. El Estado es responsable
La actual crisis política y económica que atraviesa el país, con una creciente inflación, precarización laboral y un mayor ajuste de las políticas públicas, conlleva una creciente feminización de la pobreza, ensanchando la brecha de género, lo que determina una mayor exposición a todo tipo de opresión sin poder contar con las herramientas necesarias para ejercer libertad y autonomía.
¡NO a la precarización de nuestras vidas!
¡No al pago al FMI!
Exigimos presupuestos y recursos necesarios para prevenir y erradicar las violencias por razones de género, con un abordaje integral, con un enfoque de género y derechos en cada situación, con políticas públicas que involucren mayor territorialidad para mejorar la accesibilidad y contar con suficiente personal capacitado para su atención en las distintas instituciones.
¡Basta de Femicidios, Transfemicidios y Travesticidios!
¡Basta de Abuso sexual de las niñeces y adolescencias!
¡Basta de justicia misógina y adultocéntrica!
Nos seguimos preguntando: ¿Dónde está Tehuel?
Es urgente y necesario:
-Garantizar patrocinio jurídico gratuito para las situaciones de violencia por razones de género y abuso sexual contra las niñeces y adolescencias.
-Fortalecer la red de refugios (hogares integrales) con articulación adecuada con las distintas jurisdicciones.
-La implementación de la Ley Micaela, con la transversalización de la perspectiva de género en el sistema judicial, las fuerzas de seguridad, los hospitales y centros de salud.
-Plena aplicación de la Ley de Educación Sexual Integral (ESI) en todos los niveles de educación.
-Cumplimiento pleno de la Ley IVE/ILE. Consejerías de Salud Sexual y (no) reproductiva. ¡Las niñas y niñes no son madres!
-Hacer campañas de promoción y prevención en los medios masivos de comunicación a fin de generar verdaderos cambios para el abordaje adecuado de los distintos tipos de violencia.
-Contar con dispositivos interdisciplinarios de detección y acompañamiento en todas las instituciones públicas, escuelas, hospitales, servicios locales y juzgados para todas las situaciones de violencias contra mujeres, diversidades, niñeces y adolescencias.
-Implementar equipos interdisciplinarios e intersectoriales en nuestros hospitales y centros de salud con perspectiva de género para abordar las distintas situaciones de violencia en el ámbito laboral.
-Otorgamiento inmediato de la Licencia por Violencia de Género (Ley 14.893/17), tanto en ámbito laboral como privado, para las mujeres y disidencias trabajadorxs de la administración pública provincial.
#VivasLibresYConDerechosNosQueremos
#LaDeudaEsConNosotrasYNosotres
Secretaría de Política Sindical de Géneros, Mujeres, Diversidades y Disidencias de CICOP