Buenos Aires 6 de marzo de 2022
CICOP, como cada 8 de marzo, Día Internacional de las Mujeres y Disidencias Trabajadorxs, se suma a la lucha colectiva en las calles, visibilizando las opresiones históricas existentes sobre las Mujeres y Disidencias inmersas en un sistema patriarcal capitalista que nos conduce a la desigualdad de base estructural que vulnera nuestros derechos en cada uno de los espacios en los que nos desarrollamos: en el acceso a recursos, al poder y en los comportamientos sociales y económicos.
La simultaneidad del paro internacional en varios países desde el año 2017 le da a esta fecha mayor impulso para la visibilización de nuestros reclamos y demuestra la fuerza política con la que miles de mujeres y disidencias salimos a gritarlos y exigirlos. Desde ese año, CICOP adhiere al paro internacional en nuestros hospitales y centros de salud.
Cada 8M paramos y movilizamos contra la violencia machista, contra los femicidios, transfemicidios, travesticidios, abuso sexual en las infancias y adolescencias y todo tipo de violencia hacia nosotrxs.
Luchamos contra las desigualdades en todas sus formas en pos de la equidad.
Marchamos contra la precarización laboral y los despidos. Es inadmisible que el gobierno siga despidiendo a trabajadorxs, como ocurrió en el Hospital Cuenca Alta de Cañuelas, en su mayoría mujeres, muchxs sostén de familia, luego de haber estado en la primera línea de asistencia durante la pandemia. ¡No somos descartables!
Marchamos por condiciones laborales y salarios dignos y por trabajo y techo para todxs.
La deuda es con nosotras y nosotres y no con el Fondo Monetario Internacional. El acuerdo con el Fondo precarizará aún más nuestras vidas, significará recortes en salud, educación, políticas sociales, mayor ajuste en los salarios, falta de trabajo o aumento de trabajos informales, donde las mujeres y disidencias son siempre las más afectadas.
Exigimos políticas públicas de cuidado necesarias para que se revierta la desigualdad y la vulneración económica con doble o triple jornada laboral a las que están expuestas las Mujeres e identidades feminizadas por tener la responsabilidad sobre el trabajo doméstico y de cuidados.
Desde CICOP exigimos que en nuestros ámbitos laborales existan lactarios (espacios de lactancia) para lxs trabajadorxs, así como la presencia de jardines parentales para que las trabajadoras/es puedan conciliar las tareas del ámbito laboral con el familiar.
Este año, luego de muchos años de reclamos, se logró una ampliación de las licencias parentales. ¡Exigimos el pleno cumplimiento de las nuevas licencias y que sean sin pérdida salarial! ¡Estos derechos debe abarcar a residentxs y becarixs ya!
Es fundamental la presencia de Comités Interdisciplinarios e Intersectoriales capacitados en Género y Violencia para abordar las distintas situaciones de violencia en nuestros ámbitos laborales. Las Mujeres y Disidencias somos las que estamos más expuestas a situaciones de violencia. Ante la solicitud de una licencia por Violencia por Razones de Género, tanto en el ámbito laboral como en el privado, deberá ser otorgada a la trabajadora en forma inmediata.
¡Exigimos que se implemente la Ley Micaela en nuestros hospitales y centros de salud!
Para que se pueda garantizar el derecho de la población y en particular, el de las Mujeres y Disidencias a recibir una atención de su salud integral, es necesario presupuesto y personal suficiente y capacitado. Tenemos derecho al acceso a consejerías y a todos los métodos anticonceptivos.
¡Implementación plena de la LEY IVE sin dilaciones y consultorios de acceso integral para las personas diversas y disidentes sexuales y de género!
Es muy urgente y necesario disponer de presupuesto y recursos para PREVENIR Y ERRADICAR LA VIOLENCIA POR RAZONES DE GÉNERO, con políticas que involucren mayor territorialidad para mejorar el acceso, con un acompañamiento transversal y multidisciplinario, garantizando el patrocinio jurídico gratuito, con fortalecimiento de la red de refugios (hogares integrales), articulación adecuada con las distintas jurisdicciones municipales, provinciales y nacionales, así como con los distintos organismos barriales.
La perspectiva de género debe ser transversal en todos los sistemas de atención de mujeres, niñez y disidencias, víctimas de situaciones por razones de género, en los sistemas judicial, policial y sanitario.
Es importante que las mujeres y disidencias podamos avanzar en cada ámbito laboral y espacios donde militemos, no solo en cuanto a la paridad, sino también en la distribución equitativa de los lugares de decisión ¡Tenemos derecho a que se escuchen nuestras voces!
La aplicación plena en todos los niveles educativos, privados y públicos de la LEY DE EDUCACIÓN SEXUAL INTEGRAL es importante para prevenir embarazos no intencionales, que las niñeces y adolescencias aprendan sobre el cuidado de su cuerpo, que puedan estar alerta sobre probables acosos, abusos o violación intrafamiliar o por extraños.
La ESI también es fundamental para cambiar poco a poco las estructuras patriarcales que nos atraviesan, con la posibilidad real de que se eduquen a pibxs que no desarrollen violencia en el futuro, en igualdad y en diversidad.
Es necesario derribar los roles y estereotipos de género que nos impone la sociedad, el aprendizaje del respeto por las otras personas y la afectividad. Es imprescindible trabajar la construcción de las masculinidades a través de esta herramienta para desarmar las violencias y contribuir a erradicarlas.
¡Por una sociedad más justa, equitativa, con respeto por nuestros derechos y una vida libre de violencias y opresiones hacia las mujeres y las disidencias!
No a la precarización de nuestras vidas
La deuda es con nosotras/es
Basta de Violencia Machista
#VivxsLibrxsYDesendeudadasNosQueremos
Secretaría de Género de CICOP
Marzo 2022