17 de mayo de 2023
Del 15 al 21 de mayo se celebra la Semana Mundial del Parto Respetado. Esta iniciativa se impulsa a nivel mundial desde el año 2004 y tiene como objetivo principal visibilizar el modo en que son atendidas las personas con capacidad de gestar y las personas recién nacidas y exigir el cumplimiento de sus derechos.
La consigna de este año “Salud es parir libres de violencias” intenta mostrar la necesidad de construir procesos de acompañamiento y cuidado de la salud libres de violencias. Los equipos de salud deben garantizar la atención tanto de la persona recién nacida como de la persona gestante en clave de derechos, género y diversidad.
En Argentina, existe la Ley de Parto Respetado N° 25.929 sancionada y promulgada en 2004 y finalmente reglamentada en 2015. A su vez, se implementó la “Guía de Parto Respetado de la Provincia de Buenos Aires” que tiene el propósito de ser un instrumento que contribuya al proceso de transformación de los modelos de atención y gestión de los hospitales bonaerenses.
La violencia obstétrica es una de las formas en las que se ejerce violencia de género sobre la mujer durante el trabajo de parto, parto y posparto. Es la que ejerce el personal de salud sobre su cuerpo y el de su hije, expresado en el trato deshumanizado, el abuso de medicalización y la patologización de los procesos que atraviesan en esos momentos.
Responsabilidad de los equipos de salud
Los y las trabajadoras de salud que acompañan y asisten nacimientos deben garantizar los derechos vinculados al embarazo, parto y puerperio. Los datos actuales permiten visibilizar la magnitud de los desafíos pendientes:
-Tendencia creciente de cesáreas en el sector público: en el año 2011 se registró una tasa de 27% mientras que en el año 2019 ese mismo porcentaje ascendió a 36%
-En el año 2019 el 52% de las personas que cursaron su primer parto le realizaron una episiotomía, una práctica que no está recomendada de manera rutinaria.
Toda persona gestante, en relación con el embarazo, el trabajo de parto, el parto y el puerperio, tiene los siguientes derechos:
a) A contar con una consejería en opciones dentro del marco de la atención integral. La misma consiste en generar un espacio de diálogo y escucha activa, brindar asesoramiento e información que permita a la persona la toma de decisiones de manera libre y autónoma con relación a su situación sobre el embarazo, su continuidad y su deseo de maternidad.
b) A ser informadx sobre las distintas intervenciones médicas que pudieren tener lugar durante esos procesos de manera que pueda optar libremente cuando existieren diferentes alternativas.
c) A ser tratadx con respeto, y de modo individual y personalizado que le garantice la intimidad durante todo el proceso asistencial y tenga en consideración sus pautas culturales.
d) A ser consideradx, en su situación respecto del proceso de nacimiento, como persona sana, de modo que se facilite su participación como protagonista de su propio parto.
e) Al parto natural, respetuoso de los tiempos biológico y psicológico, evitando prácticas invasivas y suministro de medicación que no estén justificados por el estado de salud de la parturienta o de la persona por nacer.
f) A ser informadx sobre la evolución de su parto, el estado de su hije y a que se le haga partícipe de las diferentes actuaciones de los profesionales.
g) A no ser separadx de su hijo/a. Favorecer que la atención de la persona recién nacida tenga contacto piel con piel con la persona puérpera. En caso de ser necesario llevarla a otra habitación, se favorecerá su acompañamiento por parte de quien la persona puérpera elija. Cualquier intervención realizada sobre la persona recién nacida será autorizada por la persona puérpera.
h) A estar acompañadx por quien elija durante todo el proceso, ya sea por su pareja, o por alguna persona acompañante familiar o no familiar.
i) A que se respete la identidad de género de la persona gestante durante la atención del embarazo, parto y puerperio, ya que el acompañamiento, la atención y el cuidado deben ser desde una perspectiva de género y diversidad.