El miércoles 19 fue la fecha del primer paro nacional de las mujeres contra la violencia machista y el alarmante y vergonzoso número de femicidios en nuestro país. Convocada por las organizaciones que nuclean a las mujeres y respaldada por organizaciones sociales y sindicales, culminó con una masiva marcha hacia Plaza de Mayo que se repitió en las grandes ciudades del país. CICOP dijo presente en esta cita de honor. Esperemos que los gobernantes comprendan la gravedad de los hechos y tomen medidas, destinando presupuesto y generando políticas para poner fin a la violencia machista. Las mujeres y la inmensa mayoría de los hombres hemos dicho ¡¡BASTA¡¡
19 DE OCTUBRE: #NOSOTRAS PARAMOS#NI UNA MENOS#VIVAS NOS QUEREMOS
Los ecos del Encuentro Nacional de Mujeres aún resonaban en los debates, balances y propuestas de trabajo. El repudio a la represión que recibimos las mujeres que marchamos en Rosario se escuchaba todavía, cuando recibimos la brutal, dolorosa noticia del femicidio de la adolescente marplatense Lucía Pérez.
Estos hechos fueron detonantes para el llamado del Colectivo Ni Una Menos y la inmediata adhesión de más de 50 organizaciones, entre ellas nuestro gremio CICOP y la CTA A. Dos reuniones organizativas bastaron para que el 19 estuviera instalado. Las mujeres decidimos realizar un Paro Nacional de 13 a 14 hs. y movilizar con las consignas #NosotrasParamos #NiUnaMenos #VivasNosQueremos.
Las cifras son elocuentes: durante el año 2015 se registraron 286 femicidios, según la ONG Casa del Encuentro. Un relevamiento realizado a través de los medios digitales por MuMalá registra, entre el 1 de enero y el 17 de octubre de 2016, 226 femicidios, de los cuales 19 corresponden al mes de octubre. Hoy tenemos que sumar otros tres femicidios en Mendoza. Es que el empoderamiento de las mujeres cuestiona a aquellos hombres que creen que somos objetos de su propiedad.
Las razones del patriarcado están profundamente instaladas en la cultura y mucho hay que cambiar. En ese camino, ya lo venimos diciendo, el Estado tiene un rol fundamental. Pero también el cambio tiene que darse en nuestros hogares, en los lugares de trabajo, en la política, en los gremios y centrales sindicales.
Entre los reclamos de nuestro gremio, resaltamos: modificar las licencias por nacimiento, extendiéndolas y haciéndolas compartidas para contribuir a la redistribución de las tareas de cuidado; aprobación de la licencia laboral por violencia de género en todos los ámbitos; jardines parentales para niños y niñas en todos los ámbitos de trabajo; rechazo a las becas y todas las formas de trabajo precario; mejores condiciones de trabajo y salarios acorde a la labor que realizamos; cumplimiento de la Ley de Educación Sexual Integral; aprobación del Proyecto de Ley por la Despenalización y Legalización del Aborto
