CICOP ante la propuesta de Presupuesto para Salud 2018
Más allá de las arengas de campaña, es en el Proyecto de Presupuesto que el Ejecutivo envía al Parlamento donde se terminan los discursos y se puede ver claramente cuáles son las prioridades del Gobierno Provincial.
Si nos referimos a Salud, durante los últimos 10 años las partidas destinadas para atender las necesidades de este sector prácticamente no variaron, encontrando su punto más bajo en el transcurso de 2017, donde la injerencia fue de apenas un 5,65 % del presupuesto total.
Esta penosa situación impactó de lleno en la calidad de atención que se le brinda a lxs bonaerenses, en manera especial a quienes menos tienen. No debemos obviar que, en un contexto de creciente desigualdad social, son cada vez más las personas que acuden al sistema público de Salud, hallando dificultades crecientes en las respuestas que el mismo ofrece.
Entre la “década ganada” y “la alegría del cambio”, el presupuesto para Salud, como así también para otras áreas sensibles, involucionó, no superando nunca el dígito del 6%. Ese retroceso se tradujo en la decadencia de los hospitales, los centros de salud y las condiciones de trabajo de sus trabajadorxs, quienes con su esfuerzo diario sostienen y defienden el Sistema Público de Salud para que continúe siendo gratuito, universal y de calidad para todxs. La situación actual implica la perpetuación de la imposibilidad de conseguir personal para cubrir los puestos vacantes, habida cuenta de que los bajos salarios y las malas condiciones laborales conforman un cuadro que, de no revertirse, seguirá condenando a trabajadorxs y pacientes a una situación aún peor a la que se padece. Mayor desgaste laboral para los trabajadores, menor oferta de servicios para la población.
El escenario para el año 2018 no es alentador. El proyecto de Presupuesto provincial prevé para el año próximo gastos por 629.962 millones de pesos, con un déficit de 30 mil millones y pedidos de endeudamiento por más de 60 mil millones de pesos. De dicho total, se destinará para la cartera de Salud apenas 39.893 millones, un 6,33 %. Desde hace tiempo venimos denunciando que el porcentaje consignado a Salud es exiguo y contribuye a agravar sus carencias. Con la inflación consolidada como punto de referencia, la partida de Salud es claramente a la baja.
Sin lugar a dudas, la falta de voluntad política para mejorar el Sistema Público de Salud no sólo se visibiliza en los bajos presupuestos establecidos, sino también en la subejecución de los mismos. Diversas informaciones públicas dan cuenta de un gasto muy por debajo de lo que debiera haberse efectuado a esta altura del año, lo que implica un desmedro aún mayor ante la grave situación del sistema. De este modo, la no utilización de los recursos disponibles por ley afectó el funcionamiento de programas y áreas específicas, de las cuales podemos mencionar como ejemplo el Plan Provincial de Control de Cáncer, que tuvo una ejecución del 17 % del presupuesto fijado.
Desde hace tiempo, CICOP viene denunciando que el porcentaje del presupuesto consignado para Salud es exiguo y contribuye a agravar sus carencias. Exigimos un presupuesto que no debiera estar por debajo de los dos dígitos, serio, que se ejecute y alcance para llevar adelante los programas y las áreas que presentan serias dificultades para su desarrollo. Ese debería ser un primer paso hacia la inversión estatal que se necesita para revertir la situación.
Por eso, a lxs Legisladorxs que tienen la responsabilidad de emitir su voto sobre este Proyecto de Ley enviado por el Ejecutivo, les pedimos que recuerden:
¡¡¡LA SALUD PÚBLICA NO PUEDE ESPERAR!!!
Consejo Directivo Provincial de CICOP