HOSPITAL FIORITO DE AVELLANEDA: ¡A ESE TREN NO NOS SUBIMOS!
La grave crisis a la que está siendo empujada la Salud Pública y que no nos cansamos de denunciar (bajos presupuestos asignados que repercuten en salarios deprimidos, falta de personal, falta de insumos, de condiciones de higiene y seguridad, etc.) pone en peligro la continuidad de un servicio esencial para la población más vulnerable de Avellaneda y localidades aledañas: las y los niños.
Nos referimos al Servicio de Pediatría del Hospital Fiorito, que viene hace meses alertando a las autoridades hospitalarias de las dificultades que acarrea sostener un funcionamiento –de por sí deficiente- con las condiciones estructurales ya descriptas. Se fueron sumando a la falta de medidas de cuidado del personal que realiza guardias, presiones desmedidas de las autoridades para sostener la atención sin poder garantizar medidas mínimas de seguridad e higiene en el lugar de trabajo. Las renuncias de pediatras, hartxs de esta situación, fueron agravando la cuestión y las respuestas nunca fueron suficientes.
La última advertencia que realizaron al respecto las autoridades de la Región Sanitaria VI, fue «quien no se sube a este tren, se queda abajo» (sic), amenazando con quitar la sede de la Residencia de Pediatría y dar un golpe de muerte a un Servicio que es indispensable para gran parte de la población más vulnerable de la provincia de Buenos Aires.
Queremos preguntar a las autoridades: ¿Por qué se tomaron tanto tiempo en dar la cara y tomar en cuenta las advertencias que se venían haciendo desde lxs profesionales de pediatría? ¿Les importa dejar sin la atención necesaria a miles de niños y niñas pobres? Las falencias del «tren» de la Salud Pública que conducen, ¿son atribuibles solamente a lxs profesionales? ¿Seguirán sin tomar nota de la crisis estructural de la Salud, avalando la «fuga» de lxs profesionales que se forman en el sector público, por someternos a condiciones de trabajo inapropiadas y no cuidarnos? ¿Piensan que «subirse al tren» es una cuestión de buena voluntad, mientras que el cuerpo y la responsabilidad por nuestros pacientes parece ser sólo de nosotrxs?
Desde CICOP no avalaremos ningún cierre de Servicio, menos aún de una Residencia. Dejaremos en claro que defenderemos las condiciones de trabajo del equipo de Salud hasta las últimas consecuencias y que nuestra voluntad y compromiso es sostener la Salud Pública como derecho de todas y todos los bonaerenses y de sus trabajadorxs. Es obligación de las autoridades, de la Gobernadora Vidal, del Ministro de Salud Scarsi y de la Dirección del Hospital garantizar las condiciones óptimas para la atención.
Al tren del abandono, el de los presupuestos de miseria, el de trabajadorxs avasalladxs, con salarios misérrimos, desprotegidxs, vulneradxs y violentadxs, a ese tren no nos subimos. ¡A ese tren lo paramos con lucha y organización!